Situación número tres. ¿Habrá alguien normal?
A día de hoy es algo que no puedo responder, pero estaba
empezando a pensar en ello, cuando de pronto entró un nuevo mensaje.
Lo borro, lo leo o no lo leo?.
Está bien, habrá que leerlo.
“Hola soy Estefanía y tu perfil me ha sorprendido, pues en
las cosas que escribes, se nota que eres una persona amable y sensible. Si te
apetece, podemos quedar algún día y charlamos. Un beso”.
Vaya!!! Pensé, este mensaje además de agradable, me invita a
conocer a alguien.
Será real o lo habré soñado?.
Mejor vuelvo a leerlo……………el resultado fue el mismo,
No me lo puedo creer!!!!!........es de verdad.
Mi respuesta:
“Hola Estefanía, me alegra saber que te ha gustado mi perfil
y yo al ver el tuyo he pensado que eres una mujer que parece ser muy, pero que
muy dulce y agradable, así que cuando tu quieras, quedamos y conversamos. Un
abrazo”.
Al día siguiente Estefanía me respondía:
“Hola Javi, te parece bien que nos veamos este viernes????”.
Tu dirás. Besos”
Mi respuesta:
“Si desde luego, dime dónde y a qué hora????, pero eso si, y
si no te importa, envíame alguna fotografía (es que en su perfil no había), más
que nada para poder reconocerte. Gracias y besos.”
Su respuesta:
“Aquí te envío una. El viernes a las 6 de la tarde te espero
en la calle Gutanín, 25, que hay una cafetería muy mona y así nos podemos tomar
un café. Besos”.
Al ver la fotografía, yo pensé que me moría, qué mujer más
guapa, que sonrisa, que ojos. Ufff no me lo puedo creer y encima es amable.
El viernes a las 6 de la tarde estaba yo en la calle
Gutanín, sentado en la terraza de la cafetería donde habíamos quedado y claro,
con los ojos como platos esperando a Estefanía.
Mientras espero entusiasmado la llegada de esa diosa de la
belleza, se me acerca una chica y le digo: toma, solo llevo suelto un par de
euros pero eso por lo menos te dará para un bocata (y para lavarte los pies,
pensé yo, porque le salía musgo de entre los dedos de los pies, de la roña que
tenía la tía. Que el musgo no dejaba ver si llevaba sandalias o botas de alta
montaña).
Al terminar mi frase, se oye una voz que sale de la boca de
esa pobre chica y que dice: Hola Javi, soy Estefanía……………….
Al oír aquello y en vez de perder el conocimiento (que es lo
que me hubiese gustado), intenté reprimir las ganas de morirme allí mismo y muy
amablemente la invité a sentarse.
Después de asegurarme que aún tenía la cartera del dinero en
el bolsillo de la chaqueta, le dije a Estefanía que si no preferiría que
fuésemos a otro lugar en donde el gentío no interrumpiese nuestra conversación
(al Nepal por ejemplo, pensé), pero ella dejando ver su amarilla dentadura
declinó tal ofrecimiento diciendo: No, si aquí estamos muy bien.
Yo no sabía donde meterme, que no hacía más que pasar gente
dejándonos monedas sobre la mesa en donde estábamos sentados mientras
murmuraban: pobrecillos, seguro que viven en el metro.
Una señora mayor nos dió, la pobre, la mitad del sandwich
que se iba comiendo mientras decía a su amiga: “A estos les hace más falta que
a mi”.
Para entender bien la situación, he de decir, que esta
Estefanía se parecía a la diosa de la fotografía, en que en algún momento de su
vida, ella había leído una revista en donde apareciese una mujer que por lo
menos oliese bien.
Yo para mis adentros pensé, si lo sé me voy con la
Eustaquia, que por lo menos solo olía a oveja y lejía.
Yo no sabía que decir…………hablo de su vestuario?………noooooooooooooooo,
eso noooooooooo, que iba vestida como si acabase de rodar la película de
Aladino y no le hubiese dado tiempo a cambiarse. De su pelo?…………..peor, aún
peor, pero esta mujer se habrá peinado alguna vez??????????????.
Ya sé, debe ser Hippie…..así que hablaré de los años 70 y si
es que las nauseas que me provocan su hedor, dejan paso a alguna palabra entre
arcada y arcada.
Bueno, dije yo, y que tal todo????.
Ella respondió un………. bien.
Y ya está???.......no va a decir nada más????
Pues no, no decía nada más, así que tuve que preguntar de
nuevo (y en qué hora).
A que te dedicas???????
A nada, dijo ella.
Eso ya se nota (pensé yo), que no debes ni abrir el grifo de
la ducha, aunque sea para comprobar que corre el agua y que no se entaponen los
grifos.
Valor Javi y empieza a buscar alguna escusa…………pero mientras
pregunta.
Bueno…………..y qué cosas te gusta hacer????.
Pues poca cosa………….(vaya pensé, tres palabras seguidas).
Te gusta el cine o el teatro??????.
No que va.
Leer????
No
Música????
Si algo.
(otra señora mayor que nos deja la merienda, al final la
mesa se llena de cosas).
Y ya sin poder resistirme, le pregunto: ¿Esto es una cámara
oculta verdad?
A lo que ella contesta…….por????
En ese momento hago como que me suena el teléfono. Le digo:
es que lo tengo en silencio para que no moleste……..y leo atentamente el
inexistente mensaje y le digo………uy perdona, pero es algo urgente y si no te
importa, hemos de dejarlo para otro día.
Ella solo contesta: vale, pero quedaremos otro día
verdad??????????????????
Creo que salí tan deprisa,
que el ya veremos lo dije en mi casa, mientras me duchaba para quitarme el
recuerdo de esta cita.
Intenté lavarme el cerebro para olvidar todo aquello, pero
por mucho que frotaba, lo único que conseguí fue quitarme media cabellera.
Mis últimos pensamientos esa noche fueron: mañana borro el
perfil y me traslado a otra ciudad.
CONTINUARÁ………..
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