miércoles, 29 de octubre de 2014

Capítulo 22 - Lo conseguí !!!! (Parte 2)

En el capítulo anterior ya os conté, que Esperanza me llamó y claro, su número de teléfono quedó grabado en mi teléfono fijo.

Así que pasados unos días, la llamé para ver que tal se encontraba y ya de paso, a ver si conseguía una cita con ella.

“Hola Esperanza, buenas noches”

“Quién es??”

“Soy Javi, el otro día me llamaste y me dijiste que tenías muchas ganas de hablar conmigo”

“Javi?, qué Javi?”.

“Si mujer, me contaste que te había dejado tu novio el carpintero”.

“Ah ya!!!, si bueno, pero te llamé por error, yo con quien quería hablar era con mi amigo Antonio”.

“Jajajaja, ya me di cuenta, pero oye, dada esta casualidad telefónica, lo mismo te apetecería que nos conociéramos en persona”.

“Pues no sé yo. La verdad es que no quedo jamás con desconocidos”.

“Mujer, ya no somos desconocidos. Creo que después de la conversación tan profunda que tuvimos, ya nos conocemos algo no?”.

“Bueno eso es cierto y la verdad es, que después de aguantar el chaparrón que te cayó encima, por lo menos deberíamos quedar para pedirte disculpas”.

“Bueno, no serán necesarias las disculpas, pues estaba claro que no iban dirigidos a mi, aquellos improperios”.

“Venga, me parece bien. Dime dónde y cuando quedamos”.

“Si te parece bien,  este próximo viernes y además  podemos ir al grano.

“Pero oye!!!!................no vas tu un poco deprisa?”.

“A ver, que me refería a ir al  “Grano” que es un restaurante valenciano que hay en el centro de la ciudad, en el que ponen un arroz muy bueno, y de ahí su nombre”.

“Ah,  si es eso si, vale”.

“Pues nada, nos vemos allí el viernes a las 2 de la tarde”.

“Nos vemos”.

Estaba yo muy contento, pues Esperanza había aceptado mi invitación y tendría la oportunidad de conocerla en persona.

El viernes sobre las 12 de la mañana, me empecé a acicalar para mi cita con el amor de mi vida y mientras me estaba duchando, (si, es que un mes pasa enseguida y ya tocaba), me di cuenta que la crema corporal que tenía estaba caducada desde hacía por lo menos 7 meses.

“Joer!!! y ahora qué hago???”.

“No me da tiempo a comprar una, pero, seguro que mi vecina Elena tiene y me la presta”.

Ni corto ni perezoso, salí de la ducha y me enrollé una toalla a la cintura, salí al pasillo y llamé a la puerta de mi vecina.

Cuando la puerta se abrió, Elena me miró de arriba abajo y me dijo:

“Hola Javi, qué haces así???”

“Perdona, es que tengo una cita, mucha prisa y no tengo crema corporal y venía a ver si tu me puedes dejar un poco.

“Claro hombre, espera”.

Al poco salio mi vecina con un bote de crema de coco.

“Toma, esta es la que tengo y además huele muy bien”.

“Gracias, luego te la devuelvo”.

Según decía estas palabras y como ya era un poco tarde, me di media vuelta rápidamente y noté como la parte baja de la  toalla se me enredaba en el pie derecho, y al dar el paso con ese pie, la toalla se vino abajo completamente, dejando mi culo al aire y a la vista de mi vecina.

“Jajajaja” se oyó detrás de mi.

Ahí estaba yo, en el descansillo de la escalera, con el culo al aire, un bote de crema en una mano y con la otra recogiendo la tolla del suelo.

“Buenas tard….” dijo el vecino del tercero que subía en ese momento por las escaleras con sus hijos y su suegra.

El vecino tenía los ojos como platos de la impresión, los niños se estaban partiendo de la risa mientras el padre les tapaba los ojos y la suegra sufrió un desmayo.

“Perdón” dije, “es que….” , no dio tiempo  a más, tal era mi vergüenza que ni terminé la frase, me puse rojo como un tomate y cerré la puerta de mi casa.

“Qué torpe soy por dios, pero que tope”.

Pero no había tiempo para lamentaciones, era tarde, muy tarde y mi amada seguro que ya estaría dirigiéndose hacía “El Grano”.

Me dí la crema, me eché desodorante, me puse colonia y me vestí a la velocidad del rayo.

Era Noviembre, pero ese día hacía un calor propio del mes de Agosto.

Yo llegaba tarde, salí del metro y empecé a correr hacía el restaurante.

“Uff que calor hace”.

Según corría, empecé a notar como las gotas de sudor despertaban a la crema de coco y ambos comenzaban a resbalar por mi cuerpo por dentro de la ropa.

“Pero por qué hace este calor ¡!!”, me lamenté.

“Qué hace ahí ese Sol?, que debería hacer frío, si frío, que es Noviembre y estamos por lo menos a 35 grados”.

Mis preguntas no obtuvieron respuesta, pero la humedad era cada vez más intensa y los chorretones circulaban libremente desde mi nuca hasta los hombros, inundando mi cuello de un líquido viscoso y de color blanquecino.

Al fin llegué a la puerta del restaurante y menos mal que Esperanza todavía no había llegado.

“ Y cómo me seco yo ahora todo este sudor impregnado en coco?”.

No tenía pañuelos de papel y encima, aquél Sol abrasador caía como plomo derretido sobre mi cuerpo.

Noté como por la espalda resbalaba la crema, y también cómo la camisa que llevaba puesta ya no absorbía más líquido........mi cuerpo estaba empezando a mostrar el sudor con olor a coco hacía el exterior.

La combinación de sudor, crema, colonia de Nardos (que a saber de qué nardos la habían sacado) y desodorante de Aloe Vera, estaban dejando tal “pestuzo”, que la gente que entraba al restaurante, me miraba con cara de asco.

Pasaban los minutos y yo intentaba meterme debajo del toldo que había en la puerta, pero como estaba enrollado (que ya les vale a los del restaurante con el calor que hacía), la sombra solo daba para taparme los pies.

Que por cierto, con las prisas se me había olvidado echarme el “Peusek” y el olor que emanaba de mis zapatos, combinaba a la perfección con el hedor del resto de mi cuerpo.

“Qué desastre” pensé.

“Y por cierto???”

“Cómo voy a reconocer a Esperanza???”.

“Si no la conozco ¡!!!”

El tiempo pasaba y Esperanza no aparecía o si, pero como no sabía como era, me puse a preguntar a las chicas que veía solas cerca de la puerta del restaurante.

“Hola perdona, eres Esperanza?”, le dije a una.

La chica y mientras se tapaba la nariz contestó:

“No, me llamo Margarita y tu harías bien en lavarte de vez en cuando so cerdo”.

“Perdona eh!!!”

A mi izquierda había otra.

“Hola, no serás Esperanza verdad?’.

“No, no lo soy y doy gracias al cielo por ello”.

Y sin mediar palabra empezó a vomitar.

Calle abajo apareció otra mujer, levanté el brazo (el cual tenía a la altura del sobaco un rodal de sudor que se apreciaba desde la Luna),  y haciéndole señales le dije: “Si eres Esperanza estoy  aquí.”

A lo que ella contesto: “Si hijo si, eso es lo que tu necesitas, esperanza y un buen baño”.

Derrotado por las negativas, cansado y mal oliente, me senté en un escalón de la entrada al restaurante.

La gente empezó a echarme monedas.


CONTINUARA………….

Capítulo 21 - Gracias Cata

Hola Cata.

En primer lugar quiero agradecerte que me hayas concertado una cita.

En segundo lugar quiero decirte…………….que te odio ¡!!.

Vamos por partes.

Aunque tú no lo sepas, ya encontré a la mujer de mi vida. Se llama Esperanza y estoy intentando conocerla mejor, bueno, para ser sincero, estoy intentando conocerla.

Pero de todas maneras quedé con tu prima, más que nada por deferencia a ti y por eso te pedí su dirección.

La verdad es que sí debe tener un fondo maravilloso, pero debe estar tan al fondo, que yo no fui capaz de llegar a él.

Ah….que sepas, que de lo que no tiene fondo es de comer ¡!!!!

 Te cuento lo que pasó.

Quedé con ella en un restaurante, que afortunadamente era buffet libre.

Nos sentamos en una mesa, obviamente después de las presentaciones.

Al verla me dio buena impresión, si, pero a partir de ahí, la impresión que me dio me dejó una cara que bien valdría para Haloween.

Tu prima del pueblo, que por cierto, no es que sea de pueblo, es que llevaba el pueblo en todo su interior, empezó sirviéndose ensalada, pero en tal cantidad, que en Murcia aún siguen cosechando para que pueda terminarse el primer plato.

Cuando terminó y sin mediar palabra, porque claro, a ver quien habla con la boca llena de 20 kilos de espárragos, se sirvió su segundo plato.

Ahí yo creí que el mundo se terminaba, pues es IMPOSIBLE, que quepan 14 solomillos en un solo plato.

Cuando terminó de mascar, dijo: “Es lo malo de los buffet, que siempre se quedan cortos aposta”.

Con su tercer plato yo pensé que estábamos en un campeonato de a ver quien come más y se sirvió una merluza de pincho entera, que por lo menos debía pesar 10 kilos.

Bueno pensé, lo mismo para y podemos hablar de algo.

Pues no señor.

Ella dijo: “Aún me queda sitio para las legumbres”.

Y si, si le quedaba sitio.

Se comió ella solita la producción de alubias y lentejas que según las estadísticas se consume en un año en Asturias.

Un inciso, eso que solo se pedorrea en el baño, díselo tú a la pareja de novios que estaba sentada en la mesa de detrás de ella, que tuvieron que ser asistidos por el SAMUR, por insuficiencia respiratoria.

O a los de la mesa de detrás de los novios que estaban celebrando una despedida de soltero y se fueron los seis con tupé.

O al resto de los comensales del restaurante, que entre vómitos se tiraban por la ventana para dejar de sufrir y eso que el buffet estaba en un séptimo piso.

Mira cata, yo sé que te caigo bien y tú a mí, pero como vuelvas a presentarme a una prima tuya, vamos a perder las amistades.

Pd. A lo de la merienda va a ir tu prima!!!!!!!!!!!

Y nunca mejor dicho.

Javi.



martes, 28 de octubre de 2014

Capítulo 20 - Mi prima quiere conocerte

Hola Javi, tengo algo que contarte. Ha venido mi prima del pueblo y como tenemos mucha confianza, le he hablado de ti y quiere conocerte. No es una belleza, pero ahora se está poniendo muy mona, desde que se hizo la depilación láser, todos tenemos ya claro que es una mujer. Tiene un fondo maravilloso, es buena persona y cocina que no veas, aunque también come mucho la jodía, el problema es que le encanta la fabada y las lentejas, pero es muy educada y las ventosidades sólo las expulsa en el baño, a última hora, cuando sabe que no va a entrar nadie después, sobre todo desde que casi se carga a la abuela María, que lleva con oxígeno desde entonces…

Te la presentaría hoy mismo pero es que el día que vino no sé qué narices la pasó que se la enganchó la maleta en las escaleras mecánicas de la estación de tren y se pegó la gran leche arrastrando consigo a dos personas mayores. Todos están ya fuera de peligro, pero como ella es tan entregada a los demás, ha decidido pasarse la semana en casa de los abuelos, dándoles de comer, limpiando y sacándoles a pasear, se siente muy mal por lo sucedido, como verás es una chica estupenda, fíjate que sólo les ha pedido 650 Euros por atenderles toda la semana.

Así que ella ha pensado organizar una merienda el viernes por la tarde a las 6 donde los abuelos y así te vas metiendo ya en familia, pues ella dice que ya les quiere como si fueran de su sangre, ¡qué mujer, qué sensibilidad! Y me ha asegurado que nada tiene que ver con la mansión de 6 habitaciones que tienen los pobres ancianitos en La Moraleja.


Si quieres, llámame por teléfono y te doy la dirección.  Ya me contarás qué tal. Besos.

viernes, 24 de octubre de 2014

Capítulo 19 - Ernesto no es "single" o si no, que me lo expliquen...

Increíble Javi ¿ves? la "esperanza" es lo último que se pierde..., Ya me contarás cómo te va con tu amada...., eso sí, compra klines en cantidad para que no la falten a la muchacha, ja,ja,ja. No me odies por esto, me lo has puesto a huevo. 

Bueno ya, ahora tendrás tú la oportunidad de reírte, porque mi próxima aventura es de "pabernos matao"

Resulta que una amiga me presentó a su primo, que se llama Ernesto y de verdad, un chico muy majo, hemos quedado un par de veces y fenomenal, pero el otro día me invitó a comer a su casa para que la conociera, o a saber...:

Llegué a casa de Ernesto un poco más tarde de la hora, para no ser muy agobios, pero él no estaba, le llamé y me dijo que perdonara que se había ido a coger setas y se había perdido por el campo que ya estaba de camino, que en un ratito llegaba. Yo pensé, bien, setas para comer, éste no tenía otra cosa en la nevera, espero que las conozca y no me envenene….El ratito se transformó en 45 minutos, durante los cuales, yo no sabía ni dónde meterme, pues mi querido amigo vivía en una urbanización a tomar vientos en la que no había ni bares, ni tiendas, ni un puñetero banco para sentarse, estuve a punto de no cortarme ni un pelo y sentarme en el suelo.Bueno el caso es que Ernesto apareció con un niño de unos 15 años, una niña de unos 13, una abuela de unos 85/90 y una mujer super escotada de unos 35 y yo no entendía nada, venían todos de la mano y parecían la familia feliz. Al verme, empezaron las presentaciones, primero el hijo, luego la hija y tatatachan….., la del escote su mujer y la abuelita su suegra…., ¡qué bonito, todos juntos en armonía! vamos para flipar, se me debió de notar la tensión porque al darlas dos besos casi las dejo marca en la cara y se libraron de que hincara el diente, ¡qué desfachatez! Bueno, pues el muy carota me presentó guiñándome un ojo como “la amiga de Marta que viene de fuera y vende ropa de mujer” cuando habíamos estado durante dos semanas mandándonos mensajes y me mandaba flores todos los días por whatsapp, sin contar con las dos citas para ir al cine y a cenar, además de su manifestada intención de tener una relación de pareja conmigo. ¡Gili, que eres una gili, pensé! Claro, luego vi su mensaje en el móvil: “socorro mi mujer, los niños y mi suegra, no se han ido, disimula y sígueme el rollo, no he podido avisarte, luego te explico” tarde, capu......

Como la mujer parecía muy maja y la abuela tenía aspecto de estar camino del cementerio, no quise fastidiar ni provocar un homicidio involuntario, así que con diplomacia pero sin morderme la lengua me despedí de la siguiente manera, porque este, claro, de rositas no se podía ir.

“Me vais a disculpar pero he tenido una llamada urgente mientras cogíais setas en el campo y debo marcharme, así que no podré comer con vosotros. Lo de las pastillas para la impotencia sexual de Ernesto, ya lo hablaremos otro día que pueda venir, no os dejo catálogo de productos para alargar el pene, porque no lo tengo aquí a mano, pero él tiene mi tarjeta, pues ya ha venido varias veces a verme, de todas maneras, en la consulta también puedo atenderos, no hace falta que me invitéis a comer, aunque os agradezco el detalle. Mientras tanto, ya sabes Ernesto, la pastillita verde antes de… ,la roja después ¡y suerte!”

Seguidamente me fui tan contenta y erguida ante la cara sudorosa y roja de Ernesto, la mirada atónita de los niños y de su mujer y los chillidos de la abuela diciendo “¿qué ha dicho que el Ernesto e impotente?”


Bueno, después de esto, de quién me puedo ya fiar, ¡qué horror, Javi!

Capítulo 18 - Lo conseguí !!!!!! (Parte 1)

Si, ya tengo novia, jejejeje.

Parece mentira, pero si.

Encontré a esa mujer que hará de mi vida una alegría constante.

La cosa fue así:

Viernes, 22 horas.

Yo estaba viendo Sálvame de Luxe edición especial  "Paquirrín" cuando sonó el teléfono.

“Hola buenas noches”

“Hola” dije yo.

Que voz más dulce pensé.

“Soy Esperanza”

“Y?”

“Pues nada, que hacía mucho tiempo que no sabía nada de ti y por eso te llamo”

“Ah”

Ella seguía hablando, mientras yo, intentaba recordar quien era esa chica.

“Si, me apetecía mucho hablar contigo, aunque tal vez te moleste a estas horas?”

“No que va”, dije yo mientras me devanaba los sesos intentando recordar quien era.

“Pues nada y cómo te va la vida?” dijo ella.

“Bien, me va bien”, mentí con la mayor de las sutilezas.

“Y a ti?”, pregunté yo.

“La verdad es que fatal, me va fatal”.

“Mi novio me ha dejado” (llanto).

“Bueno mujer…………….”

“Bueno dices????”

“Quiero decir, no que sea bueno, si no que, ya sabes, que cuando una puerta se cierra, otra se abre”.

“Qué????.....................mi novio era carpintero y hacía puertas (más llanto)”

“No, a ver, quise decir, que siento mucho lo que te ha pasado, pero que a veces pasan estas cosas”.

Ella llora tanto que las lágrimas empiezan a salir por el auricular de mi teléfono y me están inundando el único oído bueno que tengo.

“Mira”, dijo ella, él era el amor de mi vida y ahora se ha ido”.

“Bueno mujer, tienes que calmarte y quedarte solo con los momentos buenos”

(Más llanto)……………”Que sepas, que me ha dejado por un hombre”.

Y ahora que digo yo????

“No jodas!!!” (frase perfecta para calmar a alguien, lo mismo no hay más frases en el mundo).

(Llanto desconsolado y torrente de lágrimas al otro lado del teléfono y a este lado del teléfono)

“Mira Esperanza, no sé que decirte, imagino que estás muy enfadada con el carpintero, pero con el tiempo, seguro que podrás superarlo”.

(Se corta el llanto de repente).

“Mira, yo te llamaba, porque pensaba que me consolarías, pero veo que no, veo que estás haciendo todo lo contario………..”.

“Esperanza, yo no pretendía hacerte sentir mal, solo quería darte ánimos”.

“Pues lo estás haciendo estupendo hijo!!!!!”.

(El llanto se convierte en odio)

“Y además creo que mi carpintero se fue con otro por tu culpa”

“Por mi culpa, pero si tan siquiera sé quién eres???” (Uy, se me ha escapado).

“Tu eres tonto y además un imbécil”.

“Mira Antonio!!!!!!!!!!!!!!! Me estás poniendo de los nervios!!!!!!!!!!!!”

“Antonio????, pero si me llamo Javi!!!”.

“Si, tu encima empieza con tus bromitas!!!!”

“Que no mujer, que me llamo Javi”.

“Vete a la mierda!!!!!!!!!!!!”.

“Pero oye…………..que………………….”

Tututu……………..tututu (sonido que hace el teléfono cuando alguien te cuelga).



Ella ya no estaba al otro lado del teléfono, pero mientras me secaba la inundación lacrimal de mi oído, me quedé mirando el cielo estrellado de aquella noche y ahí supe, sin dudarlo un momento, que aquella mujer me amaba.


CONTINUARÁ……………….

miércoles, 22 de octubre de 2014

Capítulo 17 - El Modelito (Malena)

¡Vaya tela Javi! Siento que hayas tenido que pasar por todos esos incidentes, desde luego, no saben valorarnos, mira lo que me pasó a mí el otro día:

Resulta que había quedado en un bar con un tal Jose que me mandó un mensaje en nuestra página favorita, ya sabes, je,je. Bueno, el caso es que yo me senté en una mesa, bueno más bien en una silla con una mesa delante y de repente veo aparecer a un pedazo de hombre que se me pusieron los ojos que me salían destellos y hasta me parecía oir de fondo la música del anuncio de Dolce & Gabana, ¡qué pedazo de tío! En fin que aquel monumento se acercó a mí y me dijo: “Hola, soy yo, Jose Luis”. Yo, apenas podía articular palabra, pero me dio para decir: “Vaya tela, uy perdón, encantada” en ese momento mi instinto humano sentía ganas de tirarse en plancha a besar aquella cara perfecta, pero mi educación y sobre todo, mi timidez no dio ni para acercarme. El chico se sentó a mi lado y empezó a explicarme sin más toda su trayectoria profesional como modelo, deportista, fisioterapeuta, entrenador de tenis y no sé qué cosas más, porque creo que el día no le daba para tanta actividad ¡qué estress por Dios! Yo pensaba y ¿cuándo podría yo disfrutar de ese pedazo cuerpo? Si nunca está disponible.

Una vez terminó su historia, de repente me preguntó: Bueno, María ¿y tú de qué eres modelo? ¿de pijamas de invierno tipo manta o disfraces? Porque hija, no tienes nada colocado en tu sitio…. Je,je. ¡Ahhh! Pensé, ya salió el capu….., algo malo tenía que tener, esta es la mía y así le contesté:

Bueno te cuento. Primero, yo no me llamo María, que con tanta belleza exterior lo que no tienes es nada dentro de la cabeza, muchacho, me llamo Cata, de Catalina, ya sé que suena a caca, pero no, ni se asemeja a semejante guarrería. Por otro lado, yo no soy modelo, ni mucho menos, porque no sé mover el culo al andar y porque me encantan los bollos, las hamburguesas y las patatas bravas. Para estar comiendo todo el día lechuga y subiéndome a la báscula a ver si he cogido un gramo, prefiero no vivir. Además, el deporte me da alergia, prefiero verlo en la tele y que corran otros, tampoco entreno a nadie, no tengo paciencia y me liaría a pelotazos con el alumno, ya que en mi pueblo lo que hacemos es frontón y para mí la pared puede ser cualquier bulto ¿ehhhh? Dicho esto, añadiré que soy administrativa en una empresa de seguros, por cierto, ¿tienes asegurado ese bonito cuerpo? Yo te puedo hacer una oferta, para ti y para tus amiguitas las que pasan modelos de lencería, pero ya te aviso que no se incluyen prótesis, te lo digo por si tienes algo que no es tuyo. Por cierto, majo habría que verte en la foto de la primera comunión, seguro que llevabas este horrible traje de marinero, ¿a que ya te he bajado un poquito la autoestima y se te ha ido todo el encanto, eh….?

Me embalé tanto que no me di cuenta de que el chaval se había ido hace un rato a la barra en busca de su verdadera modelo María, un pedazo de Barbie que sí tenía todo colocado en su sitio.

Pero yo me quedé de a gusto…. Ufffff.


Bueno Javi, yo sé que valgo mucho por dentro, ja,ja,ja. Lo conseguiremos, verás, llegará nuestro lobo feroz, porque yo príncipes ya no quiero. 

martes, 21 de octubre de 2014

Capítulo 16 - Vaya semanita !!!! (Javi)


Hola Cata.

Tu experiencia gótica, me parece, que no fue todo lo buena que tu hubieses deseado, y creo que a este paso, nunca encontraremos una pareja con la que poder compartir nuestras vidas.

A mí me pasan cosas curiosas constantemente, pero creo que es por mi impaciencia por encontrar un alma gemela.

El lunes iba yo por la calle a paso acelerado, cuando me crucé con una chica, la cual me guiñó un ojo según pasaba a mi lado.

Yo seguía andando mientras la miraba y claro, no pude resistir la tentación de decirle: “Gracias guapa”.

Ella me miró, volvió a guiñarme el ojo y me dijo: “Guapa de qué imbécil”.

“Pero no me has guiñado un ojo?”.

“Pues no” dijo ella, “Es que tengo algo metido en el ojo que me molesta, idiota”

“Perdona” dije yo, “Pero me dio la sensación, de que te había gustado”.

“Jajajaja” dijo ella, mientras se alejaba.

El martes, por la noche y mientras fui a bajar la basura al contenedor, me encontré con una vecina.

La verdad es que es una mujer encantadora y claro, aproveché la ocasión para insinuarme, pero la cosa no fue bien………

“Hola buenas noches” dije yo.

“Buenas noches” dijo ella.

“Que noche más buena hace verdad?” y añadí “Las noches tienen un olor especial….”

“Jajajajja” dijo ella…………..” Te refieres a ese olor especial a pescado podrido que debes llevar en esa bolsa????…..jajajaja.”

“No, me refería al olor que desprende la noche……..”. Esta frase la dije según veía que ella se marchaba muerta de la risa hacia su casa.

El miércoles a mediodía, entré en un restaurante para comer y mientras leía el menú, una voz dulce me dijo: “Hola, qué te apetece comer?”

Al mirar hacia la persona que me hablaba, ví a la camarera, una mujer con una sonrisa encantadora.

Me quedé mudo durante un instante y después le dije: “Me gustaría tomar sopa de ajo de primero y alubias de segundo”

A lo cual respondió ella: “Se te va a quedar un aliento con la sopa, que no quiero yo pensar que saldrá después con las alubias…..jajajaja”.

El jueves fue un infierno.

Según me levanté de la cama, llamó a la puerta la chica que viene a planchar y la verdad es que no está nada mal, pero claro, yo, que según me levanto de la cama, parece que me han pisado doce elefantes y me han arrastrado tres kilómetros por un camino polvoriento, cualquiera le dice algo a nadie.

No obstante lo intenté…………

“Hola Irina”

“Hola Javi”

“ Qué tal estás????”

“Pues parece que mejor que tu, que tienes aspecto de cerdo recién revolcado en el fango…………...”

El viernes salí por la noche, a una de esas discotecas para mayores de 50 años.

La cosa no fue bien, allí me encontré con una amalgama de gente intentando ligar los unos con los otros, pero curiosamente nadie quería hacerlo conmigo y me fui de allí oliéndome los sobacos, a ver si es que el desodorante me había abandonado…..y si, debió abandonarme hace años.

El sábado me quedé en casa y solo recibí la visita de la cartera de Correos.

Sonó el timbre de la puerta, abrí y allí estaba ella, vestida con ese uniforme que no le sentaba nada bien.

“Buenos días” dijo ella.

“Qué tal estás dije yo”

“Bien, gracias, aquí tienes un telegrama”

“ Y es bueno?” dije yo.

“Alguna vez has recibido un telegrama que sea bueno???

“NO”

“Pues hala, firma aquí que tengo mucha tarea”.

El domingo me quedé en casa, a ver si por una de esas casualidades de la vida el bloque donde vivo se venía abajo y así dejaba yo de sufrir.

Pero no, el bloque siguió en su sitio y yo tuve que levantarme el lunes para ir a trabajar.

No sé Cata, pero creo que nunca encontraré pareja.

Ya me contarás como te va a ti.


Besos.

viernes, 10 de octubre de 2014

Capítulo 15 - Mi experiencia "gótica" (Malena)




Hola, no sé si decir pobre Javi o pobre Karen, ¡vaya aventura elevada…..! Ja,ja,ja.

Pues hijo si te cuento en la que me metí el otro día, alucinas. Resulta que me encontré una amiga de la infancia y me dijo que su hermano también se había separado hace poco y que quería una relación estable, así que le dije que me lo presentaba, a ver qué pasaba. Quedamos en la puerta del Bar Vampiro, que ya el nombre prometía y cuando llegué , sólo pude ver a un mendigo muy extraño vestido todo de negro sentado en el suelo, como me tendió la mano, le di una moneda y en ese momento, cuando le miré bien a la cara¡ay madre! Me puse de todos los colores, ¡era el hermano de mi amiga. “Hola Cata, soy Sergio, ¿me ayudas a levantarme? estaba pensando”, me dijo y yo con cara de poker, le contesté,  “¡uy qué  cambiado estás! “ “soy Gótico” me dijo “ ¡ah, no sabía que estudiabas Arte, qué bien!” Le contesté desde mi inocencia. El chico me miró alucinado, me dio un abrazo y me dijo, “siento mucho lo tuyo” yo pensé que si él sentía lo mío, que tendría que pensar yo de lo suyo, pues el pavo parecía una réplica del Marilyn Manson,  es que hasta pensé que se había manchado la boca de regaliz y es que llevaba pintados los labios de negro. Parecía un cadáver andante hasta tal punto que cuando me preguntó dónde íbamos, solo se me ocurría la palabra “cementerio”. 

Lo mejor vino después, como yo no sabía ni qué decir, me propuso entrar en el “Bar Vampiro” y conocer a sus amigos, yo acepté. Gran error, pues yo no tengo nada que ver con Zombies ni nada parecido y de repente me vi envuelta en una auténtica película de terror. Una gente muy maja y my espiritual, pero muy rara, rara, rara y los apodos ya ni te cuento, “Noche oscura” “Celebración mortal” “Drácula” “Mefistófeles”…., leche que no había ni uno que se llamara Pepe. Allí estuvimos tomando algo, yo una cerveza, ellos un líquido rojo que llamaban “My blood” (o sea, mi sangre) y que no sabía de dónde lo habían sacado ni tampoco tomé interés en ello, porsiaca…. Por lo menos tenían puesta música de Cantos Gregorianos, muy relajantes, vamos que casi me quedo frita.

Mi quedada con Sergio y sus amigos góticos, terminó en el momento en que decidieron ponerse a hacer espiritismo, entonces yo me disculpé diciendo que no me llevaba muy bien con mis difuntos y que prefería que no aparecieran, así que carretera y manta, salí de allí zumbando.

¡Qué momentos, Javi! Es que no damos una, ja,ja,ja.

miércoles, 8 de octubre de 2014

Capítulo 14 - Respuesta al mensaje de Cata (Javi)

Hola Cata…………Jajajajaja.

Perdón, no he podido reprimir la risa, disculpa, pero es que lo que me cuentas es muy fuerte, en fin.

Yo por mi lado poco que contar, mensajes y más mensaje que entran en mi buzón de correo, pero ninguno de ellos me llama la atención.

Bueno, hubo uno que si lo hizo.

La chica que lo envió se llama Karen y ponía lo siguiente:

“Hola Javi. Qué tal estás???

Alguna vez has hecho el amor en un ascensor???”.

Si eso ponía (dicho con cara de idiota).

El mensaje seguía diciendo:

“Perdona si te parezco un poco descarada, pero es que me encantan los ascensores”.

Si eso ponía (dicho con cara de idiota)

El mensaje seguía diciendo:

“Si te gustan los ascensores tanto como a mi, no dejes de escribirme”.

Si eso ponía (dicho con cara de idiota).

Y tuve la misma cara de imbécil durante todo el rato que lo estuve leyendo, así que, no se me ocurrió otra cosa, que contestar lo siguiente:

“Que si me gustan los ascensores????

Solo hay una cosa que me gusta más que los ascensores y son las mujeres a quienes les gustan los ascensores”.

Si, ya ves, la volví a liar.

Al día siguiente recibí un segundo mensaje de Karen:

“Me encantas!!!
Mañana a las 10 de la noche, te espero en  el edificio Kubatas, ese que hay en el centro de Madrid.

No me falles eh?”


A las 10 de la noche y como un clavo, estaba yo en la puerta del edificio ese y haciéndome una y otra vez la misma pregunta: “A ver, que yo tengo vértigo y este edificio de 120 plantas tiene los ascensores por fuera de la fachada y encima son de cristal. Que según los estoy viendo, me da la sensación, que yo no lo voy a pasar bien. Que mira como van de rápido, pero por qué motivo estoy aquí?”.

Antes de poder responder a mi pregunta, se acercó a mi una mujer preciosa, vestida con un traje de noche que parecía que le iba a estallar, y que me preguntó: “Tu eres Javi verdad?”
“Si, soy yo” dije (dicho con cara de idiota).

“Hola, soy Karen” dijo ella. “Y vamos a subir a ese ascensor de ahí”.

Mi estómago empezó a revolverse y eso que todavía estábamos a pie de calle.

“Oye Karen” dije yo, “Y esto mismo que pretendes que hagamos en ese ascensor y que por otro lado me encanta (mentira), no lo podríamos hacer en un hotel?”

“Jajajajaja” rió Karen. “No es lo mismo hombre, tu ya lo sabes, así que vamos”.

Los hechos a partir de aquel momento, se sucedieron de esta manera:

Entrada al edificio: Me entran sudores fríos.

Espera en el vestíbulo al ascensor: siento como la temperatura de mi cuerpo alcanza los 40 grados.

El ascensor llega: Mis piernas no me sostienen.

Karen pulsa el botón de la planta 120: Noto como por mi cuerpo recorre una sensación de ahogo.

Planta 1: Miro por la cristalera y deseo estar en mi casa.

Planta 10: Karen empieza a bajarse el vestido por la parte de los hombros.

Planta 20: Karen tiene el vestido en la cintura.

Planta 30: Karen me mira y me dice que estoy pálido.

Planta 40: Karen me ve en el suelo y me dice qué que me pasa.

Planta 50: A Karen se le cae el vestido al intentar levantarme.

Planta 60: Karen me dice que tengo lo ojos en blanco y que se está asustando.

Planta 70: Karen intenta componerse el vestido con la mano derecha, mientras llama al Samur con su mano izquierda.

Planta 80: Karen llora.

Planta 90: Yo también lloro, pero es porque he recobrado el sentido y estoy viendo a la gente ahí abajo que parecen hormigas.

Planta 100: Karen consigue levantarme y yo la miro fijamente a los ojos.

Planta 110: Karen me mira a los ojos y esboza una sonrisa.

Planta 120: Vomito encima de Karen.

Una vez que el ascensor se para, abre sus puertas y me caigo de espaldas al pasillo.

Abro los ojos y estoy en urgencias, tumbado en una camilla y diciendo: “Alguien ha visto a Karen?”

Mira Cata, lo dejo, yo lo dejo, no sigo más.


CONTINUARÁ………………

Capítulo 13 - En la Disco..... (Malena)

MENSAJE DE CATA

Hola Javi, tengo que contarte algo importante, más que nada para avisarte por si a ti te sucede lo mismo. Resulta que el otro día me mandó un mensaje un tal Rafa, aparentemente majo y me invitó a ir con él y con sus amigos a una discoteca para Singles. Yo como nunca había tenido tal experiencia, me animé y así le conocía. ¡Pabernos matao!  lo que me encontré. Me dijo que tenía 40 años y me encontré a un hombre de unos 60 años, cojo, medio sordo y lo peor, llevaba unos pantalones amarillos fosforitos, una camisa ceñida de rayas y unas bambas rojas. Yo creí que era uno que habían disfrazado para atraer a gente mayor a la discoteca, ya que son los que se dejan las pelas en copas. Bueno, ya sabes que yo soy muy tolerante, así que pasé por alto la mentira de la edad y la vestimenta de Rafa y me aventuré a conocer a su gente, ¡madre mía, lo joven que era Rafa al lado de los amigos que le acompañaban, pues la más joven, Marina, 65 años, tenía un trajín con la dentadura que yo no sé ni cómo no le salió disparada y me dio en el ojo y Sebastián tenía tal tembleque que para darme dos besos me recorrió la cara, de norte a sur y de este a oeste!

Bueno, yo entré con la panda de abueletes en la Disco y claro, parecía la reina del mambo, debieron pensar que era la cuidadora de los ancianos de la residencia de enfrente y me los había traído de excursión a conocer “Madrid, La Nuit”. El caso es que fue darme la vuelta 5 minutos para pedirme una bebida, pues estaba sedienta de tanto sofocón y cuando me quise dar cuenta, Rafa y sus colegas estaban en la pista de baile como locos saltando y haciendo hasta break dance. Yo estuve a punto de llamar al 112 porque temía por la espalda o por la prótesis de alguno, pero vamos que vi tal agilidad que me dio hasta envidia. Marina, la de 60 años de la dentadura movible, llevaba tal contoneo de caderas que la hicieron corrillo los chavales que había en la pista. Ismael y Luis, de 65 y 72 años respectivamente, sujetaban una cuerda cada uno por un extremo mientras Marisa, de 67 años, pasaba dando palmas con la cabeza para atrás tipo cosaco. Yo estaba asustada porque no sabía si me iba a tener que llevar los restos de los abuelos en cajas, ¡menuda paliza se estaban dando!

No conformándose con eso, Rafa vino a buscarme, me tiró del brazo y de repente empezaron a mantearme y me vi volando de un abuelo a otro sin poder decir ni mu, vamos que al final la que casi acabo en urgencias soy yo.

Resultado de la tremenda noche de marcha con mis amigos de la “resi”, me fui a las 5 de la mañana destrozada y ellos se quedaron, llevo dos días sin poderme mover de la cama porque me duelen hasta las pestañas y he cambiado de teléfono para que Rafa y sus amigos no me localicen, más que nada para poder seguir viviendo.

¡Qué experiencia Javi! A Marina le gustan de tu edad, así que si te escribe, ¡no caigas o morirás….! Su perfil es fácil de conocer, tiene la foto de la Barbi Dance L.

Un abrazo.